El uso científico de la imagen: ¿El mito del eterno retorno?

Vía Microsiervos acabo de conocer una web en el que se recogen fragmentos de vídeo rodados a 7.300 frames por segundo y otras velocidades muy superiores a las de las emisiones televisivas convencionales (25 frames por segundo). Esta técnica permite ver cosas que el ojo no capta, como por ejemplo, la onda expansiva en la explosión de un coche. El uso científico de la imagen en movimiento nos recuerda la utilización que del cinematógrafo hacen los pioneros. En un bonito libro, El trabaluz del infinito, Burch nos cuenta cómo algunos de los primeros cineastas ven el cinematógrofo más como una aplicación científica que como la industria cultural o del entretenimiento como pocos más años será.